IRRUMPIÓ LA LLUVIA
He de nombrarte en la ribera de los ríos, por las praderas y espacios baldíos, los tumbos del oleaje renombrarán la identidad unificada en la belleza, cada nube formará el cuerpo que te integra. Vencerán las opiniones ignorantes el amor fingido; esta mañana comenzó tan triste, como si el viento arrojara piedras, hiriendo la sensibilidad irrumpió la lluvia, no hay sendero andado ajeno a tus pisadas.
Los frutos caen podridos, la caducidad envuelve tu regalo entregado aquel tiempo. No recuerdo este paisaje solo, me es extraña su actitud provocativa, veo sombras fantasmales, siluetas conocidas, miradas despreciables, ya comprendo que es nostalgia, esta tarde en el ocaso la última luz limpió mi rostro.
GAPFER.
24/Septiembre /2014.