HOJARASCA ACUMULADA
Hojarasca acumulada,
va sirviendo de abono,
pensamientos símiles no propician nada,
son la basura que llegando al mar,
al espacio, donde sea nos coloca en grave riesgo.
He caminado antes por aquí,
cada vez me abruma este paisaje,
la desconsideración,
he sucumbido a la otra orilla
donde pensé no pisar nunca.
La agotada manera de creer luchar solo,
el fracaso que rompe cualquier
lazo de motivos con los otros,
el cansancio de insensibles miradas.
Ruedan las vidas con el moribundo planeta,
los inciertos futuros corren en los 2016,
de nuestra era, “nuestro” será palabra hueca pronto,
en el anunciado apocalíptico destino.
Rayos de luz parpadean sin
la claridad que se requiere,
sigo ignorando, ¿Qué Hacer?
Naufragamos en tan poco tiempo.
Hay de sobra talentos
que se pierden en sus egos,
los equilibrios se agotan.
No merece desperdiciarse otra oportunidad.
Oigo con tan clara presencia
el canto de aves paseriformes,
orando alrededor del árbol caído, duele, duele, duele.
Sin perder el horizonte
tiemblan mis ojos
en los cordeles del perímetro medido
como esperanza de augurio en año nuevo.
No he de reír como locura
en la pirotécnica mirada,
que oscurece al final de la cimbrada explosión
que irrumpe siempre, como despido de lo efímero.
Tampoco he de llorar como lamento inacabado
en tan bella noche,
quiero deslizarme entre
las olas del pensamiento irrelevante.
Burlarme nuevamente de mis penas y
sacudirme la embriaguez ajena.
Volarán las aves y en sus alas
leeremos atentos su vuelo.
Será señal de desafíos nuevos,
las nubes formarán las frases nuevas
en la inteligencia de
comprender conscientemente las tareas.
Un año vuelve exactamente al mismo tiempo,
las hojas caen,
las hojas revisten nuevas luces,
este año será el que resuelva quedarse
con mi enmarañado pensamiento,
para vivirlo intensamente.
GAPFER
31/12/2015.