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HASTA QUE SE ME ANTOJÓ SU FRUTO.
HASTA QUE SE ME ANTOJÓ SU FRUTO. Por Fernando Galeana Padilla. No había pensado en el almendro hasta que se me antojó su fruto, recordando mi niñez, los atrevidos momentos en que me trepaba para alcanzar las almendras más altas y mancharme todo, comiendo al por mayor, con una falta de culpa, con la sonrisa tan natural que, se convirtió en la vida; quizás extrañamente, como llamada de atención, me arrojó un almendrazo el divagado pensamiento. Octubre 25 de 2018
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NO FALTABA NADA
No faltaba nada Por Fernando Galeana Padilla. En esa flor que no pretendía ser nombrada vivía el tiempo, no faltaba nada, la mirada encontró una vía, una especie de gusano que dejó su ser para ser transformado, se abandonó en total éxtasis. Febrero 3 de 2019.
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LAS CUERDAS DE LA NORMALIDAD
LAS CUERDAS DE LA NORMALIDAD Por Fernando Galeana Padilla Mientras los perros ladran, vociferan, filosofan, camino junto con ellos. Bostezos optimistas entre las reflexiones. Pararon las celebraciones, las luces que encendieron las esperanzas pirotécnicas, se acabó la borrachera. Las cuerdas de la normalidad paulatinamente van jalando parejo, las olas permanecen, nunca han cesado, ese ritmo acompañado al corazón costeño celebra siempre. Ahora se escucha entre ladridos y un viento susurrante, todo esto me conmueve me hace cursi pero también consciente. Puedo percibir una palabra naciendo como cuño de expresión exacta, me identifico, me la quedo y les comparto: Cursiente. Así suena este día, así me siento. Ladran los perros, aúllan,…