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POR LA NOCHE
Por la noche duele más la ausencia, todo el silencio es la voz callada del olvido, pareciera fácil conseguir motivos. Yo no me ire a dormir hasta que el sol me salve, con su tenue luz de abrazo complaciente, esa que también a ti te gusta en la mañana. Cierto es que mis ojos no ven nada ahora, la oscuridad vendada como si fuera comprada en miscelánea, se vuelve cómplice de un dolor absurdo. Pensar que en la mañana seré perdonado, es insuficiente, podría estar contigo modelando este instante, abrazados. Tampoco quiero concederte la razón de todo, que intolerante comportamiento, por cortesía esta vez, hubiera callado. No es más vulgar…
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MIS OJOS EN TUS MANOS.
Pudiera regalarte esta noche, aspirando a la felicidad reflejo el deseo de pensarte alegre, dispuesta con la energía del sol que irradia en la sonrisa perpetua de esperanza. Pudiera regalarte esta noche y descubrir un universo lleno de fragancia a nosotros, de manos que exploran cuerpos infinitos, que engendran placeres mutuos. Pudiera regalarte esta noche, manifestarte mi respeto bebiendo tus saberes, mirando tu boca llena de amor a la vida que contagia. Pudiera darte mi tiempo, este momento y el que tú dijeras; saber compartir el punto exacto en la armonía, concebir las mil horas de tus sueños. Entregar mis ojos en tus manos para que…
